Fue en ése día, no en
otro. Fue en ése momento
y no en otro. La playa lacia de arena se ofrecía generosa a los turistas. Un
enjambre de ojotas iban y venían por su orilla. Un niño, entre ellas, jugaba a atrapar el mar en su balde
rojo. Su madre, a cierta distancia, lo
vigilaba. Solo se dió vuelta un momento para
recibir el mate que le alcanzaban. Un
hombre se agachó, levantó al niño, le tapó la boca y corrió. El balde rojo se quedó solo.
Nuevo acierto de mi mañana temprana, hice un repaso de tus escritos y me siento mejor que ayer. Gracias. Me pongo a esbozar un poco de rabia amontonada anoche, leer a otros es liberarnos, me hacía falta y llegué a tu rincón, saludos, y disculpa este comentario sin retocar, así lo siento.
ResponderEliminarJOSE:
ResponderEliminarMe alegro que mi blog, te haya mandado un pequeñito rayito de luz.
Todos tus blogs tienen mucho contenido social. Éso nos acerca.
Ya te mandé un abrazo.Ahora va otro.
IRENE
Querida amiga: Qué alegría me has dado al entrar en mi blog denuevo. Me alegra verte jubilosa. Espero que sigamos viéndonos más amenudo.
ResponderEliminarUn besiño, muy, muy grande,
Rosa María Milleiro
que triste, pero asi se mueve el mal, a traición, arrebatando inocencias, saludos querida amiga
ResponderEliminarEsto que has colgado es un hecho real?
ResponderEliminarUn abraciño,
Rosa María Milleiro
Querida Rosa María:
ResponderEliminarEn lo más íntimo de mí sabía que te alegraría que trato de volver al ruedo, a mi blog que me ha dado amigas como vos.
¿Si lo que he colgado es un hecho real? Ocurre y multiplicado. No importa la edad, pero ocurre. Aquí tenemos un caso testigo el de MARITA VERÓN. Una MADRE DEL DOLOR todavía espera justicia.
Un abrazo desde Argentina.
Abuela:
Así es. Se arrebatan inocencias y la Justicia...¿Para cuando?
Tu blog sigue tan fructífero como siempre. Felicitaciones!
Irene