lunes, 13 de septiembre de 2010

SOMOS LOS MUCHACHOS DEL ...

Dicen los hinchas que al futbol se juega por pasión. Pedro era una excepción. Lo único que ambicionaba, al jugar para su equipo, era vencer (en lo posible por gole ada) Para su desgracia, en los últimos años, el campeonato lo ganaban siempre los "charrúas”. Poco a poco, la rabia fue creciendo dentro de él. Tanto creció,que le provocó una úlcera estomacal. Fue entonces que se le ocurrió la idea. Si se unían con otros clubes, poniendo cada uno lo mejor, seguro podrían hacer polvo a “Los charrúas”. Era una idea loca; pero Pedro ya estaba un poco loco.

Entre Gallos y medias noches logró hacer una reunión multitudinaria, con los pre sidentes, los contadores, los directores técnicos, los preparadores físicos y los jugadores invitados. La propuesta de Pedro fue aceptada. Lo primero, para darle una estructura al nuevo club, era contar con un presidente. La discusión fue dura (porque es sabido que la comisión directiva es la que maneja la plata) Fue elegido Fernandez (el único presidente que no tenía a su club al borde de la quiebra) Pasaron a debatir quién sería el director técnico. Todos se postularon. Cada uno dio las razones que creía tener a su favor: que era el más apto para evaluar,seleccionar , perfeccionar… Llegada la medianoche fue nombrado Pedro, en reconocimiento a su capacidad, demostrada, de liderazgo. Faltaba decidir quienes jugarían el próximo partido y que puestos ocuparían. La situación se puso tensa. No faltaron los insultos. A las piñas no llegaron, gracias a la intervención de Pedro. No dejaría que su proyecto se arruinara por esos estúpidos. Menos ahora que era el director técnico del nuevo equipo (se decía). Su rostro se crispaba cada vez más. No podía vomitar su bronca, porque un buen director técnico tiene que saber manejar y dirigir un grupo, afrontando con serenidad situaciones conflictivas. ¡Jugarán los que tienen mayor trayectoria! (dijo, con voz firme y presionando con una mano su estómago) Sorprendidos, todos asintieron con la cabeza. Faltaba un nombre que los representara. Alguien, propuso "COMPINCHES" y fue aplaudido. ¿Y los colores de la camiseta? (se atrevió a preguntar un chico que los observaba), dando comienzo a una nueva contienda. Tan larga fue, que los que no fumaban, fumaban; otros se hacían una siestita y más de uno se fue a ver si conseguía un choripán. Fue Fernandez el que, golpeando la mesa, aseguró que sería a rayas, con todos los colores de las antiguas camisetas de los, ahora, ex clubes. Uno de los jugadores pensó que sería un mamarracho (no lo dijo, por temor a que lo expulsaran) Cumplidos los trámites jurídicos, comenzaron las concentraciones.

A pesar de sus esfuerzos, Pedro no lograba que los jugadores formaran un equipo cohexionado (cada uno "pateaba para su lado")Tomó conciencia que no es lo mismo estar juntos que amontonados.

El partido decisivo del campeonato lo volvieron a ganar “Los charrúas”.Pedro no pudo asistir porque su úlcera sangraba.

4 comentarios:

  1. No se si esta historia es verídica pero bien pudo haber ocurrido. Las pasiones del fútbol son tan disparatadas a veces que algo así no suena tan descabellado. No siempre un montón de intenciones tienen la solución de un dilema. He vivido de adentro un club y hago comentarios deportivos en mi blog deportivo www.clasiconuestro.blogspot.com, por eso no me extraña semejante meollo. Saludos

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  2. Muy bueno, muy bien escrito. Felicitaciones por los avances.

    El negro.

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  3. JOSE:
    Como decís: "no siempre un montón de intenciones tienen la solución de de un problema" (y ésto no solo es aplicable al futbol)
    Pasé por tu blog: un lujo para los deportistas.
    SALUDOS

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  4. Negro:
    Gracias. Tratando de avanzar (como la hormiguita, pero avanzar)
    Besos

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